8 de abril: Nuestro pueblo será lo que quiera ser

A pesar de que las cosas estén como están siempre hay margen para mejorar y corregir los errores que se hayan cometido. En la medida de lo posible y con las limitaciones económicas del pago de la deuda queda mucho por hacer. 

Entre todos, hagámoslo. San Antonio de Benagéber será lo que quiera ser.

San Antonio de Benagéber nació con una ubicación envidiable, buena comunicación por carretera, un municipio fácilmente expandible y unos pueblos alrededor de los que aprender aciertos y errores… y con carencias subsanables, sin apenas transporte público, sin comunicación posible entre las zonas que las carreteras cortan, sin dotaciones de infraestructuras. Con una previsión de crecimiento tan alta no era complicado prever necesidades básicas (agua de calidad, transporte público, comunicación interna, colegios, zonas deportivas, biblioteca, locales municipales, comercio, tejido industrial…) La democracia eligió a quienes gobiernan y han gobernado. Y sus intereses tuvieron otras prioridades.

Ya han pasado 17 años desde la segregación de Paterna. Partiendo de el casco urbano, Colinas, Cumbres, un pequeño Montesano y los diseminados del Pla del Pou estaba todo por hacer. Y se hicieron cosas. Algunas más comprensibles, otras menos. Y se decidió apostar por un modelo, el del ladrillo. El dinero entraba a raudales con las licencias de construcción (San Vicente, el ensanche de El Valle y zona 8 de abril, Montesano nuevo…), pero salía a borbotones con todo tipo de gastos. Se tiró la casa por la ventana. Y un día el modelo se derrumbó y el grifo se agotó. ¿De dónde sacar ahora el dinero para los servicios, las nóminas, las promesas, las obras sin acabar…? ¿Cuánto de lo despilfarrado nos habría venido bien ahora?

San Antonio de Benagéber, fue lo que fue, y todo el reconocimiento a los orígenes y a los que lucharon por su existencia.

San Antonio de Benagéber, es lo que es. Y ahora que la realidad sale a la luz y nos chocamos con ella a diario es el momento de pensar en corregir y reconstruir.

San Antonio de Benagéber será lo que la vecindad quiera que sea. Si miramos atrás y nos reconocemos hoy podemos decidir qué queremos ser mañana.

Hoy es el día de la independencia, la fiesta de la segregación, ya casi mayores de edad… Felicidades ayer, hoy y siempre.

Reproducimos una reflexión en un artículo de Opinión publicado en enero de este mismo año:

¿Quo vadis San Antonio?

(...) DesdePlataforma impulsamos un proyecto de cambio, en el que queremos incluir a todos los vecinos y organizaciones que estén por superar esta situación. Un proyecto que construya una mayoría con la capacidad de reorientar el futuro de San Antonio de Benagéber.

Es un pueblo de todos y lo queremos para todos nosotros. No para hacer negocios con nuestros impuestos.
Los vecinos pueden utilizar las organizaciones existentes (partidos de la oposición, asociaciones, elementos participativos como la Agenda21 o los Consejos Escolares, etc.), o simplemente tomar el ayuntamiento y acudir a los Plenos a pedir explicaciones. Todo menos quedarse pasivos.

¿Quieres cambiar tu pueblo? ¡Actúa!

(...) Desaparecida "la gallina de los huevos de oro" de la burbuja inmobiliaria, todo son pugnas y luchas internas en el Partido Popular en el gobierno, para poder repartirse lo poco que queda del pastel. Ya no hay bastante para todos. Un partido corroído por la división. Con un Alcalde que no controla el partido y un partido que no controla al Alcalde. Y la casa por barrer. El pueblo a la deriva, sin gobernar. (...)

(...) En 1.997 empezamos a andar como pueblo independiente. Pero hacia un modelo únicamente basado en el gran negocio de explotación de terrenos, construcciones y oportunidades para grandes empresas de servicios que la independencia proporciona. Se diseñó un pueblo para vender en lugar de un pueblo para vivir. Pero no se hizo ninguna previsión para dotarlo de los mínimos servicios. (...)

(...) Y como colofón, el Ayuntamiento, está suministrando, a una gran parte del pueblo, un agua insalubre. Implicados todos los concejales del PP, votan en contra de esclarecer los hechos. (...)

(...) ¿Por qué tanto desmán? ¿Responde a puros intereses económicos inconfesables o a la prepotencia de un comportamiento caciquil, dictatorial y paternalista, que demuestre quién es el que manda? O ¿quizás a ambos? (...)

(...) Y hoy, enero de 2014, más de 16 años después de la segregación, ¿Dónde hemos llegado? Una deuda municipal de las mayores de España, 1.000 € por vecino, incluidos ancianos y niños. Un plan de ajuste que hipoteca cualquier crecimiento, mejora o mantenimiento de servicios municipales durante 12 años, por estar “intervenidos” con un Plan de Ajuste. (...)

(...)Como consecuencia, los vecinos deben hacerse cargo de la deuda, sin haber sido responsables de nada, ni haber disfrutado de los ingresos despilfarrados.(...)

Lee el artículo completo en Opinión.